Acabas de terminar uno de los momentos del año más duros ❄️❄️.
Todos se reúnen, se cuentan sus anécdotas, lo que han hecho, a dónde han ido, hacen balance de su año…
Y a ti te cuesta.
A mi me costaba hacer balance de mi año, porque lo único que podía decir era que había subido el número de vueltas a los temas, poco más podía añadir.
Pero cuando uno de esos años estaba haciendo mi lista de “objetivos cumplidos”, me di cuenta de una cosa.
Los GRANDES OBJETIVOS, esos que cambian tu vida, no suceden en un año.
Cuando un GRAN OBJETIVO se cumple es porque has sembrado un día tras otro, tras otro, tras otro, tras otro…
El año que consigas tu meta no será tu AÑO.
Tu año se cumplirá gracias a un día como hoy, que estás luchando por avanzar, por mejorar, por progresar, por escalar tu meta.
Cerca de mi escritorio tenía “mi lista”.
Cosas que escuchaba a la gente que habían hecho, sitios a los que habían ido y que yo me moría de ganas, así que lo escribía.
¿Y sabes por qué? Porque si lo piensas en mi caso nunca fue, y en tu caso nunca será un “no puedo”, porque estar ahí ES TU DECISIÓN.
Reformula la frase para cuando te flaqueen las fuerzas, NO ES UN NO PUEDO.
Es un “NO PUEDO DE MOMENTO, PERO PODRÉ”.
Tu plaza no es el final del camino, es el principio de uno nuevo.
A POR TODAS COQUITO 🖤.